miércoles, 14 de julio de 2010

VOLVER A EMPEZAR...


Esta frase a los españoles les sonará de una manera positiva al ser nombrada en la ceremonia de los "OSCAR´S" en Hollywood en el año 1982... Garcí no se lo creía. Pues bien, hoy es el día en que vuelvo a empezar de una manera positiva aislado de los ladridos, algunos justificados y muchos envueltos en el murmullo de la alegría bajo las faldas de "eso lo sabía yo". Los años me han otorgado tranquilidad, al menos estos últimos meses de lucha intermitente, ya que a veces es idiota luchar contra nada al igual que le pasaba al Hidalgo Caballero. Ha sido una época, un ciclo que ha terminado, que será zanjado en un tiempo porque soy hombre de palabra y este monstruo va a ser vencido al ser demostrado. Y como dice Valle Inclán "nada es como es, sino como se recuerda" y con esto me refiero a la gente que le gusta hacer leña del árbol caído y no asumir sus propios errores e intentar justificar su fracaso escudándose en otra persona. El fracaso es el camino del éxito, cada día estoy mas convencido. En este país se le tiene miedo al fracaso, por muchos motivos, por el famoso "que dirán", por ser juzgado, por ser machacado. Los que alguna vez habéis resbalado sabéis a qué me refiero. De todas maneras, formamos parte del universo y nos transformamos con él. Hace dos semanas pusimos fin a la época de "CAL DANI" mi restaurante. No voy a adentrarme en dar muchas explicaciones, ya que si no, me sumerjo en una nube negra de odio hacia personajes que se están riendo y disfrutando de ello. No les voy a engañar, es doloroso, sentirte que has defraudado a alguien o incluso a ti, por otro lado el apoyo de muchos de tus acreedores o proveedores, las fuerzas que nacen de cualquier esquina de tu alma, esa fuerza que te dice: - Esto está cerrado, pero aquí va a terminar de cobrar todo el mundo- (no sé como, pero por mis cojones que esto queda limpio), esa montaña de estiércol que alguien podría verla y asustarte es la que tiene una cara amable ayudándote a ser mas fuerte. Cuando pasas por la UCI como fue mi caso, por los nervios, por la ansiedad, por todo, es cuando valoras que te juegas no volver a ver a tus hijos, no poder cogerle la mano a tu amada, no poder disfrutar de tus amigos... Ahí es cuando llega el cambio. Llevo dos semanas con nuevas ideas, con proyectos que van despacio pero cuando salgan a la luz serán bienvenidos y no por no tener restaurante voy a dejar de ser cocinero, esto es un rango que te dan cuando naces, la creatividad, y no hablo de creatividad como sinónimo de vanguardia, sino de tener el don de hacer cosas con las manos, la mente y lo más importante, EL ALMA. Estos días que estamos desmontando y cargando cocinas, lámparas, mesas, sillas, cuadros, hago un esfuerzo infrahumano por no llorar, allí a mi lado están los de siempre, esos amigos que igual no haces viajes con ellos, o no te vas de copas, sino los que están en esas ocasiones duras. Ayer arrancamos con la editorial, con los pies firmes, con acuerdos firmados que nos dan tranquilidad de al menos poder vivir de la cocina que es lo que he hecho siempre, cuando me refiero a poder vivir, es a que no nos falte lo básico, que en realidad es lo que ansiamos muchos de nosotros. Estuve casi un mes de "funcionario" en el Hospital de la Vega Baja, trabajando en cocina, la vida quería mostrarme esa parte que tanto anhelan algunas personas. Aquello me mostró lo importante que era mi familia para mí, ya que la tenía lejos, me mostró mi valoración, ya que me pusieron precio con lo que ellos llaman nómina y esa seguridad que tanto ansían algunos, me hundió, descubrí quien soy y qué quiero, además de enseñarme que el único fallo que había tenido era hacerle caso a la gente, que los prejuicios me dominaran, que si este dice esto, menganito lo otro, y mi espíritu me daba fuerzas para seguir adelante y la plebe me multaba a cada paso que pegaba. Hoy soy libre, me siento bien, la atadura moral es una gran mentira que nos imponen para que no evolucionemos. Cuando uno ha luchado y los propios confiadores e interesados no han hecho nada para ayudarte, y descubres que la propia envidia hace que luchen contra sus propios intereses, te das cuenta de la miseria de la calidad humana. A veces me he sentido como un producto del "CARREFOUR", etiquetado, envasado y a la exposición de todo el mundo. Pero esto ha sido siempre, y cuántas veces hablando con amigos, les decía que no valía para exponerme, pero no es así, era una asignatura pendiente en la que ya estoy manos a la obra. Hoy es el día en que estoy disfrutando de mis hijos, que puedo irme un domingo por el monte con mi hijo Aritz, o hacerle cosquillas hasta rabiar de risa a mi hija Alaitasune o poder celebrar mi aniversario de casado con mi amor Filo a la luz de unas velas de "los chinos" en la terraza de mi casa. Esto es lo que tiene valor, sé que para muchos os puede parecer una "ñoñería" pero éste es el verdadero significado de la vida: AMAR. Algunos cocineros mezclan mis palabras emocionales con mi trabajo, y al parecerles pedante o "cursi" creen que mi cocina es así. Este ciclo de "CAL DANI" en Alcoy me ha servido como trampolín para darme a conocer. He podido viajar gracias a mi trabajo, recolectar conocimientos gastronómicos, que para nada tienen que ver con la vanguardia y esa corte tan "Rococó" con cascos de astronauta. Esa gran mentira que ahora pasa factura. Han pasado por mi casa esos seres extraños que se llaman críticos y todos se han ido contentos, han disfrutado camaradas de profesión... pero lo más importante es que yo sigo siendo feliz. Pues bien amigos míos, os cuento esto porque aunque muchos de nosotros no nos conozcamos, me ayudáis y prefiero que os enteréis por mí, sobre mis cambios, que no por bocas necias "sin oficio ni beneficio".
Seguimos en contacto...



Agradecer a la familia PASCUAL y en especial a "Montse" su confianza y desde estas líneas decirle que fue un honor acabar este ciclo ofreciéndoles la comida que se les sirvió. UN BESO.
También agradecer a Mari y Toni de la "Filà Llana" su gran apoyo. Gracias Amigos.