Desde la más tierna infancia a muchos de nosotros nos educan con leyendas de "angeles de la guarda", de ratoncitos "Pérez", "Papá Nöel", los "reyes magos de oriente", "el hombre del saco" etc...
Y a medida que vas creciendo te das cuenta que Papá Nöel no puede estar en todos los centros comerciales de España al mismo tiempo, que los reyes, si son reyes, porqué en Madrid están sus carrozas esponsorizadas por "El Corte Inglés", que el ratoncito "Pérez" no pide rescate de tus muelas y encima el muy cabrón te deja una bolsita de "chucherías" para que te sigan cayendo los dientes a causa de las caries, creo que el ratoncito "Pérez" es el "Juana Chaos" de la cúpula de los dentistas, el" hombre del saco" no le encuentras sentido, te imaginas a un vagabundo que necesita el saco para dormir en un cajero de la "CAM".
Todos estos mítos y leyendas de cuna se van demontando pero el único que queda con esperanza es el del "angel de la guarda". Hoy he conocido yo a uno de los míos, mira que hace años que tengo muy buena relación con él, pero hoy he podido ver el fondo de su mirada, de sus ojos, su sonrisa... Gracias César por tu ayuda, consejos y maestría en la cocina.
